¿Los perros prefieren rostros sonrientes?

El experimento se llevó a cabo con 43 perros. Los científicos mostraron fotografías de rostros de personas tanto sonrientes como enfadados. A cada perro se le analizó dos veces. La primera, bajo la influencia de cierta cantidad de oxitocina. La segunda, sin ápice de esta hormona.
¿Que produjo?
Los investigadores emplearon un aparato de medición ocular para controlar el tamaño de la pupila. Cuando no se encontraban bajo las influencia de la oxitocina, las pupilas de los perros se agrandaron al observar los rostros serios. Por lo que se mostró que, sin esa hormona, en un estado natural, es un elemento relevante.
Este experimento demuestra que probablemente, la oxitocina lo que hace es reducir la amenaza que los rostros enfadados podrían suponer para el perro. Lo hace más atractivo las expresiones alegres o amistosas de los humanos hacia él.
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